“Colau debe restituir el orden público en Barcelona”

El comercio de Barcelona está “molesto y muy preocupado” con la huelga indefinida que han anunciado los taxistas por la ocupación de la vía pública en el centro de la ciudad. El presidente de Barcelona Oberta, Gabriel Jené, exige una respuesta inmediata a las administraciones y ha pedido a la alcaldesa, Ada Colau, que tome medidas drásticas. Roger Pallarols, director general del Gremi de Restauració, denuncia que Barcelona "vuelve a estar secuestrada por los taxistas y esperamos una respuesta inmediata de la alcaldesa".

“Colau debe restituir el orden público”, declara Jené en declaraciones a Metrópoli Abierta. El presidente de esta unión de ejes comerciales turísticos está angustiado por el daño que está causando y causará la nueva huelga de los taxistas. El perjucio no solo es económico. También castiga la reputación de la ciudad.

PÉRDIDAS DEL 50% EN VERANO

“Estamos reviviendo la pesadilla del pasado verano. La huelga de julio tuvo unas repercusiones muy negativas para los comercios de la ciudad”, recalca Jené. El paro de finales de julio penalizó la economía de muchos establecimiento. “Del 50% en el sector de la restauración”, insiste una fuente del sector. En otros ámbitos del ocio nocturno, las pérdidas alcanzaron el 35% de la facturación en temporada alta.

“La imagen que estamos dando de Barcelona es muy negativa”, insiste Jené, que se ha puesto en contacto con Colau. La primera autoridad de la ciudad le ha dicho que no tiene competencias para mediar en el conflicto tras la decisión de la Generalitat de establecer un tiempo de solo 15 minutos entre lacontratación y la prestación del servicio a las VTC que utilizan Uber y Cabify.

CRÍTICAS A COLAU

Jené ha asegurado que Colau le ha transmitido su “preocupación” por este nuevo conflicto de los taxistas, que han vuelto a colapsar la Gran Via y el centro de Barecelona. No obstante, le pide valentía para tomar decisiones. “No se puede hacer una invasión del espacio público”, denuncia el presidente de Barcelona Oberta.

Los taxistas han colapsado el centro de Barcelona, igual que en verano / EFE

Roger Pallarols, director general del Gremi de Restauració, también se muestra indignado con la permisividad de Colau con los taxistas, de quienes dice que "hacen mucho daño a la ciudad y a la industria turística". "Colau debe terminar de manera inmediata con esta ocupación del espacio público. No se puede tolerar que los taxistas secuestren la ciudad, su economía. El pasado verano, la alcaldesa no hizo nada y esta situación no se puede repetir ahora", añade Pallarols en conversación con este medio.

Muy molesto, el director general del Gremi de Restauració sentencia: "Colau, que opina de todo, por ejemplo de las galas de Operación Triunfo, debería preocuparse más de dar respuesta a los problemas graves de la ciudad. Barcelona, lamentablemente, vuelve a hacer el ridículo".

SUSPENSO A LA ALCALDESA

La patronal PimeComerç, según informa EFE, también ha puesto de manifiesto los efectos negativos de la huelga de taxis y la ocupación del centro Barcelona. PimecComerç ha pedido a las administraciones que busquen una "solución rápida" a la problemática del sector que afecta a los comerciantes, consumidores y restauración, y "daña la imagen de Barcelona".

El comercio vuelve a sufrir las consecuencias de las iras de los taxistas. También los barceloneses y quienes trabajan o están de vacaciones en la Ciudad Condal. El conflicto de los taxistas, como recogió Metrópoli Abierta en su segundo Barómetro de Barcelona, ha castigado la credibilidad de Colau como alcaldesa. Los barceloneses puntuaron con un 4,0 la gestión de la alcaldesa en la huelga. Entonces, los cortes de la Gran Via comenzaron el 26 de julio y terminaron el 1 de agosto.

EL PROTAGONISMO DE TITO ÁLVAREZ

Entonces y ahora, el líder de los taxistas, Tito Álvarez, defendió el uso de medidas drásticas en su lucha contra las VTC. Este viernes, el portavoz de Élite Taxi, aseguró que el sector se sentía “altamente traicionado”. Dirigiéndose a sus compañeros, Álvarez añadió: “Que nadie trabaje, estamos en huelga indefinida. Ha empezado la guerra”. El líder de los taxis, curiosamente, tiene muy buena sintonía con Colau.