El presidente de CBSA, Eloi Badia, en una rueda de prensa de principios del 2020 / DF
Barcelona incumple el objetivo de reciclaje en 2019
Aunque en el conjunto del AMB se ha llegado a una tasa del 38%, un récord histórico
10 febrero, 2020 19:26Noticias relacionadas
La metrópolis de Barcelona alcanzó en 2019 una tasa de reciclaje del 38%, su máximo histórico, después de una década cerca del 35%, según ha informado este lunes el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) en un comunicado.
La cantidad de residuos recogidos que habrán estado separados correctamente supera las 550.000 toneladas en 2019, un 1% más que el año anterior. Además, el número de residuos producidos ha bajado un 2,2%, situándose en 1,5 millones de toneladas. Se trata del primer descenso desde el año 2013, unas cifras que el vicepresidente de Ecología del AMB, Eloi Badia, ha celebrado.
EUROPA AÚN QUEDA LEJOS
Sin embargo, Badia ha advertido de que estos datos no son suficientes para cumplir con los objetivos europeos. Por este motivo, también ha añadido que ya se trabaja en proyectos como nuevos contenedores con chip en los municipios de El Papiol y Sant Just Desvern.
Las localidades metropolitanas que logran los objetivos europeos --50% de reciclaje de residuos en 2020-- han pasado de seis a nueve, con la incorporación de Corbera de Llobregat (51%), Molins de Rei (51%) y Pallejà (57%).
Estos se suman a Begues, Castellbisbal, El Papiol, Sant Just Desvern, Torrelles de Llobregat y Tiana, aunque un 75% de los municipios (el 96% de la población metropolitana) aún está "muy por debajo" de este objetivo.
DEBERES DE CARA A 2025
El AMB calcula que cumplir los objetivos europeos reduciría en 15 millones de euros el coste actual de 140 millones anuales: "Si no se despliega un sistema de recogida selectiva, el coste del tratamiento puede aumentar en 45 millones en 2015".
El Acuerdo metropolitano por el residuo cero, firmado por los 36 ayuntamientos metropolitanos, establece que en 2025 todos ellos deberán contar con nuevos sistemas de recogida puerta a puerta o mediante contenedores "inteligentes".
El Papiol ha sido el primer municipio metropolitano en implantar un sistema de recogida basado en contenedores inteligentes con el apoyo técnico y económico del AMB, lo que permite identificar el comportamiento a nivel individual.
