El flamante Ferrari F355 Spider que puede conducirse por poco más de 100 euros  / XAVIER ADELL

El flamante Ferrari F355 Spider que puede conducirse por poco más de 100 euros / XAVIER ADELL

Vivir en Barcelona

La adrenalina viaja en Ferrari

Una empresa de sharing ofrece rutas por Barcelona en el clásico F355 Spider por poco más de 100 euros la hora

30 noviembre, 2017 17:21

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¿Quién no ha soñado alguna vez con subirse a un Ferrari, a uno de verdad? ¿Quién no ha imaginado cómo debe ser eso de sentirse al mando de su poderoso motor mientras todo el mundo se gira a tu paso...? Debe ser, como asegura la publicidad de la Lotería Primitiva, que no tenemos sueños baratos. Pero a veces, como en los cuentos de hadas, los sueños se hacen realidad sin tener que convertirse uno en multimillonario. Conducir un Ferrari por Barcelona ya es uno de esos sueños completamente realizables. Una empresa de Barcelona ofrece la posibilidad de ponerse a los mando de un espectacular descapotable de la marca del Cavallino Rampante por poco más de 100 euros a la hora.

Circular en un Ferrari F355 Spider es adrenalina pura. Lo ha podido comprobar en primera persona Metropoli Abierta, el medio pionero en aceptar el reto de subirse a tan fabuloso biplaza y contemplar Barcelona desde otro ángulo, casi a ras de tierra, porque el coche tiene un suelo bajísimo que casi roza el asfalto. “El F355 no es un coche que se conduzca, es un coche que se siente, que te pide que aceleres para escuchar como ruge ”, describe Alejandro Martín, jefe desarrollador de producto y gestor de equipo de Outo, la empresa que desde ya ofrece la posibilidad de alquilar esta impresionante máquina y conducirla por las calles de Barcelona.

Alejandro Martín al volante del Ferrari F355 Spider

Alejandro Martín al volante del Ferrari F355 Spider

El Ferrari podrá alquilarse en varias modalidades. La más lúdica será contratarlo para hacer una de las tres rutas previstas por la ciudad, de entre 40 minutos y casi dos horas. Todos los paseos se dividirán en dos fases: una primera de 15 minutos en las que el “inquilino” irá de copiloto, para aprender a conducir el bólido, y una segunda fase en la que ya se pondrá a los mandos del descapotable. “Un Ferrari se ha de saber conducir. Es un concepto diferente al de cualquier otro coche”, matiza Martín. Las rutas se iniciarán en la Sagrada Familia y continuarán por el litoral hasta el antiguo circuito de Montjuïc y la plaza de España (en el caso del más largo) con alguna variante por el Casc Antic. Sus precios oscilan entre los 99 euros (más IVA) de la salida más corta hasta los 299 euros (más IVA) de la más completa.

QUE TODOS TE MIREN AL PASAR

También están contempladas otras variantes, como utilizar el F355 para salir de noche (con chófer garantizado para la vuelta por si se abusa de las copas), para viajes de ida o de ida y vuelta al aeropuerto de El Prat, la conducción en grupo por turnos y hasta el préstamo para todo un fin de semana. Incluso se acepta usarlo libremente por la ciudad, convertirlo en un regalo sorprendente o arrasar utilizándolo como coche nupcial si lo que se quiere es “que en la calle todos te miren al pasar”, sonríe el directivo de Outo. Lo más novedoso de esta fórmula de renting es que para los servicios cortos no será necesaria fianza, solo tener el carnet de conducir en vigor.

 

La propuesta de Outo es todo un desafío porque el F355 Spider no es un coche cualquiera. Es un Ferrari de los clásicos, un modelo del que solo se fabricaron 2.500 unidades en la década de los 90. Se trata del primer heredero del mítico Ferrari Testarossa con una versión descapotable. “Es un modelo de culto” lo alaba Martín. Y su conducción deportiva resulta igual de única. “Conduciéndolo disfrutas como un niño. Se agarra tanto que no notas las curvas”, asegura el ejecutivo de Outo.

Y como no podía ser de otra forma, el Spider en alquiler luce un flamante color rojo. Porque el rojo es el color de Ferrari. En concreto se trata de un tono muy específico al que la marca italiana denomina Rosso Corsa (rojo de carreras). Esta unidad en concreto añade la rareza de tener la tapicería en una exclusiva tonalidad beige, en lugar de la típica negra. Y tiene el cambio manual de seis velocidades, una exigencia básica para los fanáticos de los deportivos. Hasta la radio es la original. “Es un Ferrari único”, asegura el directivo. De hecho no hay ninguno actualmente a la venta, lo que hace imposible calcular su precio de mercado.

El descapotable de Ferrari es la última incorporación a la flota de Outo, que hasta ahora se había especializado en el sharing (uso compartido) de motos mediante una plataforma que pone en contacto a los propietarios con sus posibles conductores. En el apartado de motocicletas, la empresa ofrece desde un scooter eléctrico hasta una majestática Harley Davidson. Alejandro Martín anuncia que próximamente se sumará a la oferta un segundo Ferrari, esta vez de estética moderna y cambio automático, como el Ferrari California, más alto que el F355 pero de conducción mucho más suave.

Salpicadero del Ferrari F355 Spider

Salpicadero del Ferrari F355 Spider