Edificio del Hotel Fuster, en Barcelona / Puigalder CREATIVE COMMONS 1.0

Edificio del Hotel Fuster, en Barcelona / Puigalder CREATIVE COMMONS 1.0

Vivir en Barcelona

Casa Fuster, historia viva de Barcelona

Lluís Domènech i Montaner fue el principal artífice de imprimir belleza a su construcción

24 noviembre, 2019 22:21

Noticias relacionadas

Construido entre los años 1908 y 1911, el hotel Casa Fuster es uno de los más famosos de Barcelona. Tanto por la calidad de su servicio, como por el edificio en el que se asienta. Esta construcción fue un regalo que el señor Fuster decidió realizar a su esposa, con el objetivo de dotar de una belleza superior a la ciudad de Barcelona, al mismo tiempo que demostraba su amor a su pareja.

Casa Fuster fue durante mucho tiempo la casa más cara de toda la ciudad de Barcelona, especialmente como consecuencia de los materiales que se utilizaron en su construcción, diseñada por el arquitecto catalán Lluís Domènech i Montaner, uno de los grandes exponentes del modernismo catalán, junto a Antoni Gaudí

UNA CONSTRUCCIÓN VIGILADA

Pese a la contrastada carrera que ya disponía el arquitecto catalán en el momento de acometer la obra, todas las etapas de construcción fueron muy vigiladas por la familia Fuster, especialmente por la mujer, Consuelo Fabra i Puig. Un hecho que se puede constatar en la fachada de la calle Jesús, con las iniciales de CF, en alusión a su nombre, en la parte superior de la entrada.

Conviene recordar que en este momento el arquitecto modernista ya se había hecho cargo de la construcción de obras como el Palau de la Música Catalana, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. 

MUY CERCA DE SER DERRIBADA

Con el paso de los años, el gasto mensual que se desprendía de vivir en su interior obligó a que la familia Fuster tuviera que abandonar su vivienda en los años 20. Desde ese momento, el edificio tuvo una gran cantidad de dueños, que se iban sucediendo sin proporcionar a este emblemático emplazamiento una función clara. Durante estos años fueron varios los negocios que se asentaron en su interior: barberías, bares y hasta salas de baile.

No fue hasta el año 1962 cuando la compañía eléctrica ENHER compró finalmente la vivienda. El objetivo inicial era el de derribar por completo el edificio y convertirlo en un rascacielos, por medio de una nueva construcción. Cuando el diseño y todos los planos ya estaban preparados, la compañía dio marcha atrás como consecuencia de la oposición que la sociedad de Barcelona llevó a cabo, obligando a mantener el edificio en su estado original. Además, a consecuencia del gran número de propuestas que concentró, la firma eléctrica se comprometió a hacer una restauración a nivel arquitectónico, que llevó a cabo entre el año 1962 y 1974. 

SU CONVERSIÓN A UN HOTEL

Fue en el año 2000 cuando la cadena Hoteles Center adquirió Casa Fuster y rehabilitó y remodeló por completo el interior del espacio, siempre respetando la esencia y los valores originales del mismo, como se pudo comprobar en su resultado final.

Edificio del Hotel Fuster, en Barcelona / Josep Panadero CREATIVE COMMONS 1.0

Edificio del Hotel Fuster, en Barcelona / Josep Panadero CREATIVE COMMONS 1.0

Edificio del Hotel Fuster, en Barcelona / Josep Panadero CREATIVE COMMONS 1.0

No obstante, todavía hoy se realizan diferentes trabajos de restauración con frecuencia con el objetivo de mantener el elevado valor arquitectónico de este edificio. Actualmente está posicionado como uno de los mejores hoteles la ciudad, ubicado en el barrio de Gracia y muy próximo al centro uno de los principales ejes comerciales de Barcelona. Con el paso de los años, el hotel Casa Fuster se ha consolidado como de los alojamientos preferidos por los artistas y celebridades de todo el mundo. 

UNA SEÑAL DE IDENTIDAD PARA LA CIUDAD

Además de por su importante papel como hotel de lujo, por su legado histórico Casa Fuster se ha posicionado como una de las principales señas de identidad de Barcelona. Especialmente como consecuencia de su legado arquitectónico. La obra fue además especialmente relevante para el propio arquitecto que la llevó a cabo, convertida en uno de los edificios más emblemáticos de toda su carrera profesional. 

Por su ubicación, es considerado el punto en el que concluye el barrio del Eixample. Y es tenido en cuenta como uno de los puntos más importantes que representa uno de los periodos más prósperos y de mayor esplendor de la Barcelona de la época. Casa Fuster se ha ganado el papel de ser reconocida como una de las construcciones más importantes del skyline de la Barcelona.