Quim Torra, José Guirao y Ada Colau en la gala de los premios Gaudí / EFE

Quim Torra, José Guirao y Ada Colau en la gala de los premios Gaudí / EFE

Vivir en Barcelona

Los premios Gaudí más recriminatorios y reivindicativos

'Entre dos aguas' y 'Viaje al cuarto de una madre' fueron las grandes protagonistas de la noche, aunque los políticos presos también estuvieron muy presentes

28 enero, 2019 01:02

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Los XI Premios Gaudí se han celebrado por primera vez en el Palau de Congressos de Catalunya, pero esa no ha sido la única novedad, Mag Lari se ha estrenado como conductor de la ceremonia en unos premios llenos de magia. La gala, dirigida por Lluís Danés, ha tenido un lema reivindicativo y político: “Ens cal el vostre cinema”, acompañado de una escenografía llena de espejos que buscaba poner a la industria cinematográfica catalana ante sí misma para revisar en qué punto se encontraba.

El evento más importante del cine catalán ha contado con las actuaciones de Joan Colomo, la Ju, Roger Mas, Alba Carmona, Elena Tarrats y Alfred García. En esta han competido 36 producciones en 22 categorías, en una edición caracterizada por la paridad de género entre los nominados, y por segundo año consecutivo propone un premio escogido por los espectadores.

En la velada de la Academia del Cinema Català se han dejado ver algunas personalidades políticas como el ministro de Cultura, José Guirao; el vicepresidente del Govern y conseller de Economía, Pere Aragonès; la consellera de Cultura, Laura Borràs; el presidente del Parlament, Roger Torrent; el presidente de la Generalitat Quim Torra, que se puso una corbata amarilla en honor a los presos políticos; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, quién lució una camiseta en la que se leía “Deseo de revuelta, revuelta de deseo”; el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello; el comisionado de Cultura, Joan Subirats; Janet Sanz, tenienta de alcaldía de Ecología, Urbanismo y Movilidad y Elsa Artadi, Consejera de la Presidencia y Portavoz del Govern.

EL TRANSCURSO DE LA NOCHE

Con la canción És màgic se daba por iniciada la ceremonia, una canción interpretada por todos los cantantes que incluía frases impactantes como estas: “ens menteixen els presidents” o “jo no vull pas la veritat”. Tras la actuación, Mag Lari presentó al público, con unas bromas que no hicieron demasiada gracia unas bromas que no hicieron demasiada gracia.

El primer galardón fue al mejor guión, Celia Rico se lo llevó por Viaje al cuarto de una madre. La mejor dirección artística fue para Rosa Ros por El fotógrafo de Mauthausen que recreo con detalle los campos de concentración y el laboratorio fotográfico de Francesc Boix. El premio a la mejor música original se lo llevaron Kiko Veneno y Raül Refree por Entre dos aguas, Refree quiso agradecer a su amigo Isaki Lacuesta, director de la película, que le ofreciese la oportunidad de trabajar con él.

Bruna Cusí y Laia Manzanares presentaron el Gaudí a mejor actriz secundaria, este premio se lo llevó Anna Castillo por Viaje al cuarto de una madre, quién quiso agradecer el premio a su compañera de reparto Lola Dueñas.

Anna Castillo alzándose con el Gaudí / EFE

Anna Castillo alzándose con el Gaudí / EFE


La mejor película para televisión fue Vida privada, de Silvia Munt, basada en la novela de Joan Maria de Segarra, y el mejor sonido lo recibieron Amanda Villavieja y Alejandro Castillo por Entre dos aguas.

Aida Folch y Àngel Llàcer presentaron el premio a mejor película de animación, en esta categoría ganó Memòries d’un home en pijama dirigida por Carlos Fernández de Vigo, un film tildado de machista que su propio director recomendó ver para que los presentes juzgasen por ellos mismos.

El Gaudí a mejor dirección de producción fue para Eduard Vallès y Hanga Kurucz ganaron el galardón por El fotógrafo de Mauthausen. La mejor película europea fue Cold War, un film que habla sobre la represión y la asfixia en una Polonia en la posguerra.

Sergi López y Maria Molins protagonizaron el primer momento reivindicativo de la noche, hablaron sobre la dificultad de seguir en un mundo difícil como es el cine y aseguraron que el cine catalán no tiene previsto callar ante las injusticias. Diguem no, canción de Raimon interpretada por Roger Mas hizo referencias a los presos políticos y desencadenó una ola de gritos que entonaron “Llibertat”.

Tras la actuación de Alfred García que interpretó De la tierra hasta marte, uno de los temas de su nuevo disco 1016, Mag Lari hizo algunos de sus mejores trucos de magia, entre ellos bromeó con Torra, a quién incomodó con varias bromas sobre España y con Joan Pera, a quién parecía no hacerle mucha gracia la fijación que tuvo el presentador con su mujer.

Isona Passola, presidenta de la Academia del cine catalán quiso nombrar a los presentes políticos, tras citarlos a todos recriminó que sólo dedicasen el 0,7% de los presupuestos al cine y quiso acusar directamente a Quim Torra y a José Guirao. También dedicó una referencia especial a la libertad de expresión, al cine catalán y a los presos políticos.

La presidenta de la Academia del cine catalán, Isona Passola / EFE

La presidenta de la Academia del cine catalán, Isona Passola / EFE


Elisabeth Casanoves y Adrián Grösser, actores de la serie Merlí, presentaron la candidatura a mejor cortometraje, que finalmente fue para Barbara Farré por La última virgen, un corto lleno de actrices noveles.

El mejor montaje estuvo disputado por El viento, Jurassic World: el reino caído, Les distàncies y Entre dos aguas. Finalmente se llevó el premio Sergi Dies por Entre dos aguas, que quiso compartir el galardón con todos sus maestros, el Gaudí a la mejor fotografía también fue para Entre dos aguas.

Sílvia Marsó y Pau Durà presentaron la candidatura a mejor vestuario, Mercè Paloma se llevó su tercero Gaudí por El fotógrafo de Mauthausen, una película que le supuso un dolor muy grande por lo que describe y lo que muestra, y el premio a mejor maquillaje y peluquería también fue para esta película. El Gaudí a los mejores efectos especiales visuales fue para Laura Pedro, Lluís Rivera y Ricard Barriga por Superlópez.

Itziar Castro e Iván Morales presentaron la categoría de mejor película documental, el premio Gaudí se lo llevó Carles Bosch por Petitet. El premio del público fue para Viaje al cuarto de una madre, Celia Rico recogió su segundo reconocimiento de la noche y lo hizo emocionada dando las gracias a su madre. El mejor actor secundario fue Oriol Pla, por Petra, que recibió su segundo premio Gaudí con mucha sorpresa. El premio a mejor película en lengua no catalana se lo llevó Isaki Lacuesta, el director de Entre dos aguas recibió el galardón con mucho entusiasmo y animo a todo el mundo a ir a consumir cultura.

El actor que se llevó el premio a mejor protagonista masculino fue Israel Gómez Romero, por Entre dos aguas, el actor no profesional volvía a trabajar con Isaki Lacuesta desde La leyenda del tiempo. El galardón a mejor protagonista femenina se lo llevó Lola Dueñas por Viaje al cuarto de una madre, la veterana actriz se estrenó con su primer Gaudí. La mejor dirección se la llevó Isaki Lacuesta por Entre dos aguas, que se consiguió siete de los nueve Gaudís a los que aspiraba. Y la mejor película de los premios Gaudí fue Les distàncies de Elena Trapé, una demoledora historia sobre unos amigos que se reencuentran en Berlín.

Y finalmente el premio de Honor Miquel Porter lo recibió una de las figuras más importantes del cine catalán, Joan Pera, un actor muy querido por el público catalán y que ha puesto voz en innumerables ocasiones a Woody Allen. La actriz Mercedes Sampietro, que el año pasado fue galardonada con este reconocimiento fue la encargada de dárselo al actor de comedia. 

El actor Joan Pera recibiendo el premio Gaudí de Honor de manos de la actriz Mercedes Sampietro / EFE 

El actor Joan Pera recibiendo el premio Gaudí de Honor de manos de la actriz Mercedes Sampietro / EFE