Agricultores en el ámbito rural / FUNDACIÓ LA CAIXA

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Proyectos de transformación social en el ámbito rural en el contexto de la Covid-19

10.000 habitantes serán las beneficiarias de los 38 proyectos seleccionados en la sexta convocatoria del Programa de Ayudas a Iniciativas Sociales 2020

15 abril, 2021 12:48

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La Fundación La Caixa destinó en 2020 cerca de un millón de euros para mejorar la calidad de vida la población más vulnerable que vive en el medio rural. De estos, la entidad prioriza aquellos municipios de menos de 10.000 habitantes, con el objetivo de  garantizar su acceso a los servicios básicos de atención a las personas y promover valores como la igualdad, la cohesión y la inclusión social.

Esta inversión se canaliza a través del apoyo a 38 proyectos seleccionados en la convocatoria de Acción Social en el Ámbito Rural 2020 que tendrán como beneficiarias cerca de 10.000 personas en el conjunto de España.

ÁMBITO RURAL

Este año, y a propósito de las necesidades surgidas a raíz de la crisis sanitaria y social de la Covid-19, la Fundación reforzó su apoyo a las entidades sociales. Así, el número de proyectos presentados en la convocatoria de Acción Social en el Ámbito Rural ha experimentado un crecimiento del 40% en 2020.

Este dato que confirma el déficit estructural que sufren las áreas rurales a causa de la dispersión de los núcleos poblacionales, la baja densidad de población y el envejecimiento demográfico que, a menudo, actúan de barrera para la implantación y el acceso sin límites a unos servicios de atención social de proximidad y de calidad.

INFANCIA Y JUVENTUD

Con esta convocatoria, la entidad pretende revertir esta situación apoyando directamente a las entidades sociales comprometidas con el territorio y que promueven proyectos que tienen por objetivo la promoción de la autonomía personal de personas mayores. 

que sufren alguna discapacidad o enfermedad, la atención a la infancia y la juventud, la inserción social y laboral, la lucha contra el aislamiento social y la soledad no deseada o el fomento de la convivencia en el marco de la diversidad social y cultural.

LÍNEAS DE ACTUACIÓN

La convocatoria de Acción Social en el Ámbito Rural se estructura en cuatro líneas prioritarias de actuación:

  1. Promoción de la autonomía personal, la atención al envejecimiento, a la discapacidad o a la enfermedad.
  2. Impulso de acciones de desarrollo sociolaboral especialmente dirigido a personas con dificultades para acceder a un empleo.
  3. Apoyo al valor de la comunidad local y a la cohesión social.
  4. Atención a la infancia y juventud y a las personas en situación de exclusión.

REDUCIR EL DESARRAIGO

En el envejecimiento, a la discapacidad o a la enfermedad se han seleccionado 14 proyectos que tienen entre sus objetivos el mantenimiento de la gente mayor en el territorio reduciendo el desarraigo por las dificultades de atención, la mejora de la autonomía personas de personas con discapacidad con una atención integral en el lugar de residencia,

la prevención y respuesta ante el aislamiento social y la soledad no deseada y la interrelación de la gente mayor con personas de otras edad de ámbito de la promoción de la autonomía personal, la atención al (infancia, juventud, adultos).

DESARROLLO SOCIOLABORAL

En el ámbito del impulso de este de las acciones sociolaborales, dirigidas especialmente a las personas con dificultades para acceder a un empleo han sido seleccionados 11 proyectos que plantean dos objetivos: el diseño de itinerarios de inserción sociolaboral adaptados a los potenciales y características del medio rural y el fomento del emprendimiento, la autoocupación y los proyectos de cooperativismo.

La tercera línea prioritaria, de apoyo al valor de la comunidad y la cohesión social, ha seleccionado 10 proyectos que impulsan el fomento de la participación y la creación de vínculos sociales entre diferentes territorios rurales, nuevas formas de desarrollo comunitario más participativas y que generan nuevas respuestas a retos del territorio, gestión de la diversidad social y cultural y el fomento de la convivencia intercultural y la promoción de los valores culturales de las comunidades rurales.

EDUCACIÓN E INCLUSIÓN

Finalmente, el cuarto ámbito de actuación hace referencia a la atención a la infancia y juventud y a las personas en situación de exclusión social. Se han seleccionado tres proyectos que se focalizan en dos objetivos: la promoción de la inclusión y el desarrollo socieducativo de la infancia y adolescencia en situación de pobreza o riesgo de exclusión y de su entorno familiar, y programas educativos para la infancia y la juventud que favorezcan el desarrollo psicosocial.

LA CONVOCATORIA 2020 EN CIFRAS

Esta es la sexta convocatoria del Programa de Ayudas a Proyectos de Iniciativas Sociales 2020, que este año invierte un total de 17,5 millones de euros a los principales retos sociales que requieren una mayor atención y de más calidad a los colectivos más vulnerables.

Como cada año, los criterios de selección de los proyectos también han tenido en cuenta el apoyo de la Administración o la colaboración efectiva entre entidades sociales a través del partenariado y la implicación de la comunidad donde se desarrollan.

IGUALDAD DE OPORTUNIDADES

El director general de la Fundación La Caixa, Antonio Vila, ha puesto en valor el papel que desarrollan las entidades sociales en el ámbito rural ya que, sin ellas, la oferta y calidad de los servicios asistenciales en estas zonas sería muy inferior. 

“Las personas más vulnerables que viven en zonas rurales a menudo no tienen la misma igualdad de oportunidades para acceder a los servicios de atención básicos, y esta convocatoria pretende, precisamente, contribuir a revertir esta situación”, ha señalado Vila.

AGENDA 2030

El Programa de Ayudas a Proyectos de Iniciativas Sociales 2020 renueva el compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030 de Naciones Unidas (ONU), apoyando iniciativas que contribuyan al fin de la pobreza, la reducción de las desigualdades, la educación de calidad, la igualdad de género, la sostenibilidad y, entre otros objetivos, la producción y el consumo responsables.