Los jugadores del Barça celebran uno de sus seis goles al Girona / EFE

Los jugadores del Barça celebran uno de sus seis goles al Girona / EFE

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El Barça se divierte con el Girona

El líder de la Liga recupera su mejor nivel con tres goles de Suárez, dos de Messi y uno de Coutinho (6-1)

24 febrero, 2018 22:39

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El Barça, tras sufrir horrores en Stamford Bridge, se divirtió contra el Girona. En el esperado duelo entre los dos mejores equipos catalanes de esta Liga, el grupo azulgrana fulminó al cuadro gerundense en otra noche mágica de Leo Messi, adornada con la habitual entrega de Suárez y algunos destellos de Coutinho. Una semana antes de recibir al Atlético en el Camp Nou, el Barça recupera su mejor tono y encara el tramo decisivo de la temporada con la autoestima muy alta.

Llegó el Girona crecido al Camp Nou, ilusionado con otra gesta histórica tras derrotar al Real Madrid en Montilivi y su doble empate contra el Atlético. Machín fue osado y desafió al Barça a un duelo abierto, renunciando a un marcaje individual a Messi. A los dos minutos, el grupo rojiblanco tocó el cielo al aprovechar Portu un error de Umtiti para batir a Ter Stegen.

La euforia, sin embargo, fue efímera para el Girona. Lejos que resguardarse en su área, el equipo de Machín jugó con las líneas muy avanzadas, el mejor escenario para un Messi hipermotivado que exhibió su mejor repertorio en una primera parte sublime. Dos minutos después del gol de Portu, Suárez igualó para el Barça tras una asistencia del crack argentino. Al filo de la media hora, Messi marcó su primer gol, pero su mejor obra de arte llegó en el minuto 36, al sorprender a toda la barrera gerundense y batir por bajo a Bono.

COUTINHO Y SUÁREZ

El Girona, atrevido, ya había recibido demasiadas tortas, pero Messi completó un primer acto espectacular al iniciar una contra letal que contó con la colaboración de Coutinho y completó Suárez. Los cuatro goles premiaron la intensidad barcelonista pero penalizaron a un rival que quiso dar el gran golpe en el Camp Nou y salió muy golpeado.

Machín, en un ataque de realismo, movió ficha en el descanso para evitar un batacazo mayúsculo y reforzó la retaguardia con la incorporación de Planes por Aday, lesionado. El Girona, sin embargo, siguió mirando hacia la portería de Ter Stegen. Combinó con criterio pero palideció cada vez que sus jugadores perdían un balón. El quinto tanto azulgrana, sin embargo, llegó tras genialidad de Coutinho, que se inventó una rosca para desatascar un ataque muy largo y superar a Bono. El sexto, mucho más convencional, lo marcó Suárez tras culminar un centro de Dembélé, que comenzó algo apagado y terminó a un buen nivel.

El partido, por otra parte, dejó dos apuntes destacados más. Piqué fue sustituido tras sufrir un fuerte golpe en su rodilla maltrecha y Alba, de manera descarada, forzó una tarjeta amarilla que le impedirá jugar el jueves en Las Palmas. También lo intentó Suárez, de forma ridícula, pero el árbitro ignoró sus provocaciones.