La GU descubre un local de desguace de motos robadas

La Guàrdia Urbana ha descubierto a un grupo de delincuentes que se dedicada a desguazar motos robadas. El hallazgo se ha realizado gracias a la intevención de una empresa que se dedicaba, tambièn de manera ilegal, al alquiler de vehículos de movilidad personal.

Al local en el que se han venido practicando ambas actividades ilegales, que se encuentra en el barrio Gòtic, en el distrito de Ciutat Vella, ha llegado la Guàrdia Urbana alertada por el hecho de que esta empresa se dedicada al alquiler de bicicletas sin tener la pertinente licencia para hacerlo, pese a lo cual operaba con absoluta normalidad y de cara al público desde hace algún tiempo.

DESGUACE EN PROCESO

Los policías que se han personado en el local lo han inspeccionado y cuando han accedido a la parte trasera del mismo han descubierto dos motos en pleno proceso de desguace. Hechas las averiguaciones pertinentes, los policías han descubierto que se trata de dos scooters de las que las personas que en ese momento están al frente del negocio no han podido demostrar su procedencia.

Una vez comprobados los números de matrícula y los de los bastidores, los policías han certificado que se trata de dos motos robadas, por lo que han procedido imputar a las dos personas que en ese momento se encontraban al frente del negocio.

GRAN NEGOCIO

De hecho, el de las motos robadas es desde hace tiempo un gran negocio en Barcelona. Las estadísticas hablan de que se roban alrededor de ocho motos diarias en la ciudad. No están a salvo ni las pequeñas scooter ni las grandes deportivas, que los ladrones suelen lllevarse subiéndolas en una furgoneta.

El destino de estas motos suele ser el desguace para la venta de piezas de recambio, aunque muchas de ellas también tienen como destino el mercado negro de algunos países del norte de África y del este de Europa.