Droga decomisada en la operación contra una red criminal que operaba en el Port de Barcelona / POLICÍA NACIONAL

Droga decomisada en la operación contra una red criminal que operaba en el Port de Barcelona / POLICÍA NACIONAL

Sucesos

Desarticulada una banda que introducía droga en bloques de hormigón por el Port de Barcelona

En el operativo se han arrestado a 16 personas y se han decomisado 1.370 kilos de cocaína, entre otras drogas

14 diciembre, 2021 11:09

Operación conjunta de la Policía Nacional, la Guardia Civil, la Agencia Tributaria y EUROPOL para desarticular una red criminal internacional afincada en España y Países Bajos y que se habría dedicado a introducir droga en Europa a través del Port de Barcelona. Durante el operativo –llamado Eboli Bacterio–, que también se ha llevado a cabo en otras ciudades, han sido detenidas 16 personas.

Según ha explicado la Policía Nacional, la banda introducía la droga escondiéndola en bloques de hormigón a través de un novedoso sistema indetectable para los controles portuarios, convirtiéndose así en la principal vía de introducción en Europa por el Port. Hasta ahora, los agentes han logrado decomisar 2.549 kilos de metanfetamina, 1.370 kilos más de cocaína y 17.000 litros de productos químicos para la producción de sustancias estupefacientes en una operación que se ha llevado a cabo en Barcelona, Tarragona, València y Talavera de la Reina (Toledo), además de Países Bajos y Turquía.

CÁRTEL MEXICANO DE LOS BELTRÁN LEYVA

Las investigaciones comenzaron en 2017, cuando los agentes tuvieron conocimiento de una empresa mexicana que podría estar introduciendo grandes cantidades de droga en Europa a través de España. Una compañía que estaría a disposición del cártel de los Beltrán Leyva, que se valían de bloques térmicos prefabricados destinados a la construcción para ocultar la droga en su interior. Aprovechaban así sus operaciones de comercio internacional, provenientes de Sudamérica y Centroamérica, para copar el mercado europeo de sustancias estupefacientes.

Los carteles mexicanos estaban tratando así de inundar el mercado europeo de metanfetaminas, también conocidas como crystal meth –de hecho, la droga decomisada en esta operación conforma la mayor intervención de este tipo de estupefacientes en la historia–. Como resultado de estas sospechas, la policía de los Países Bajos intervino 2.537 kilogramos de metanfetamina pura en un almacén de Rótterdam en 2019. También detectó otro local de la ciudad de Utrecht en el que se almacenaba 17.000 litros de productos químicos para la producción de drogas. Dichas sustancias provenían de una empresa afincada en España y encargada de introducir la droga por encargo del cártel mexicano.

ENVÍOS POR MAR A BARCELONA

Tras el aviso de las autoridades neerlandesas, Policía Nacional, Guardia Civil y Vigilancia Aduanera aunaron esfuerzos para controlar los movimientos de la empresa responsable de esas partidas, afincada en Barcelona. Un ciudadano con doble nacionalidad española y mexicana era el responsable de todas las gestiones y principal sospechoso del cártel en España. Después de reunir todos los indicios y, con apoyo de la Fiscalía Especial Antidroga de la Audiencia Nacional, se investigó al detalle la empresa para identificar a los implicados.

En uno de estos envíos por mar, los agentes siguieron la mercancía hasta llegar a una nave industrial de Sant Boi de Llobregat. Los bloques fueron sometidos entonces a inspección, los perforaron y finalmente pudieron comprobar que había droga oculta en su interior. En total, 834 kilos de cocaína y 12 de metanfetamina. En un segundo envío a Barcelona, se abrieron en el puerto otros dos contenedores, en los que se hallaron más bloques de hormigón térmico que escondían otros 536 kilos de cocaína.

RED DE EMPRESARIOS CONECTADOS CON LA CONSTRUCCIÓN

Después de estas dos operaciones, los policías españoles y neerlandeses han desmantelado completamente esta organización. Faltaba detener a la cúpula, refugiada en Países Bajos, desde donde seguían controlando sus inversiones y el blanqueo de capitales proveniente del tráfico de drogas y que finalmente ha acabado con siete detenidos en este país. Los investigadores también desentrañaron la estructura de blanqueo que la organización criminal disponía en España, y es que la remisión de fondos a México se realizaba mediante la colaboración de empresarios españoles afincados en València y Talavera de la Reina, quienes habrían diseñado un complejo entramado para delinquir.

Por una parte, legitimaban la recepción de los bloques desde México. Una vez en España, los empresarios encargados de recibirlos eran también los que daban salida a los bloques de hormigón que no traían droga en su interior, contactando para ello con empresas de construcción. Algo que les resultaba sumamente difícil, porque este tipo de producto no es un material muy utilizado entre las constructoras españolas. Además, los mismos se encargaban de dar cobertura a la organización alquilando propiedades donde almacenar los bloques sin droga. También enmascaraban grandes cantidades de dinero procedentes de Emiratos Árabes Unidos y Hong Kong, que se transferían a México utilizando las cuentas bancarias de las empresas españolas.