Diez años de cárcel por matar y descuartizar a un hombre en Barcelona

Un asesino confeso ha aceptado 9 años y 10 meses de cárcel y el pago de 160.000 euros de indemnización por matar y descuartizar a un hombre a raíz de un ajuste de cuentas por drogas en Barcelona en 2008, tras lo cual permaneció fugado en Colombia, su país natal.

Tal como han informado fuentes judiciales, J.J. Tabares, de 41 años y en prisión provisional desde mayo de 2018, cuando fue extraditado, ha llegado a un pacto de conformidad en virtud del cual ha aceptado la totalidad de la pena que solicitaba la Fiscalía, que le imputaba un delito de homicidio con la agravante de abuso de superioridad y atenuante de confesión.

AJUSTE DE CUENTAS

A raíz de dicho acuerdo, deberá abonar 60.000 euros a cada uno de los padres de la víctima en concepto de responsabilidad civil, así como 20.000 euros al hermano y otros 20.000 euros a la prima, con quienes no podrá comunicarse ni aproximarse durante cinco años más de la pena de prisión impuesta.

Los hechos se remontan a agosto de 2008, cuando Tabares se enzarzó en una discusión con la víctima en el interior de un domicilio de Barcelona por un tema de drogas.

"ACTUÓ CON EL ÁNIMO DE MATAR"

De acuerdo con la calificación fiscal, en un momento determinado de la reyerta, el asesino empuñó un "instrumento cortante", se acercó súbitamente a la víctima y se lo clavó reiteradamente en cuello y cabeza, provocándole la muerte.

Tabares actuó de este modo "con el ánimo de acabar con la vida" de la víctima y "asumiendo que tal desenlace pudiera producirse a resultas de su acción", sostiene el Ministerio Público, que lo acusa de aprovecharse de la ventaja de que la víctima estaba desarmada y no se esperaba el ataque, lo que redujo su "capacidad de reacción, defensa o huida".

FUGA

Posteriormente, con la ayuda de una tercera persona que no ha sido localizada, Tabares descuartizó el cadáver en varias partes, las introdujo en bolsas de basura que colocó a su vez dentro de una bolsa de viaje y de una maleta y las depositó en un contenedor de basura ubicado en las inmediaciones de su domicilio.

Tras el asesinato, el sospechoso huyó a Colombia, país al que España pidió la detención preventiva con fines de extradición en 2015, cuando la policía tuvo constancia de que permanecía allí.

CONFESIÓN

Tabares fue finalmente arrestado en julio de 2017 y entregado a las autoridades españolas en mayo de 2018, cuando se acordó su prisión provisional, condición en la que todavía permanece después de que confesara, en julio del mismo año, haber asesinado y descuartizado a la víctima "asumiendo su total responsabilidad" por los hechos.