Fachada de la Audiencia de Barcelona / EUROPA PRESS - DAVID ZORRAKINO

Fachada de la Audiencia de Barcelona / EUROPA PRESS - DAVID ZORRAKINO

Sucesos

Acusado un portero de una discoteca de Mataró por violar a una menor

El trabajador habría conducido a la chica de 17 años a un almacén del local en contra de su voluntad para abusar sexualmente de ella

15 octubre, 2021 13:05

Noticias relacionadas

Un camarero y portero de una discoteca de Mataró podría ir 10 años a la cárcel por violar a una menor en marzo de 2016. El trabajador habría conducido a la chica de 17 años a un almacén del local en contra de su voluntad para abusar sexualmente de ella.

Ahora, la Fiscalía pide una década en prisión y una multa de 1.080 euros, además del pago de una indemnización de 15.240 euros. El acusado, Jorge R.M., está procesado por un delito de violación y otro leve de lesiones.

UN CÓCTEL AZUL ADULTERADO

Los hechos sucedieron en la madrugada del 27 de marzo de 2016. La joven malagueña acudió con unas amigas a una discoteca situada en el puerto de Mataró para despedirse de la ciudad, en la que estaba de vacaciones con su familia. Al llegar a la sala, relata la víctima, el acusado, al que ya conocía, le ofreció un cóctel de color azul que le hizo sentirse mal. "Todo le pesaba e iba muy despacio", aunque no había ingerido antes bebidas alcohólicas.

La chica decidió entonces salir a la calle, momento que habría aprovechado otro de los porteros para instarla a que entrara en el almacén de la discoteca con la excusa de reponerse. Ella se habría negado, pero el trabajador la habría conducido de a dicha estancia, donde la estaba esperando el procesado, que presuntamente cerró la puerta con llave, se desnudó, la puso contra la mesa y la violó.

TRES O CUATRO HORAS AUSENTE

La víctima ha detallado que trató de resistirse en todo momento y no se percató de cuánto tiempo había pasado en el almacén. Sus amigas le dijeron que había estado ausente "tres o cuatro horas".

Tras la violación, la sacaron del establecimiento "alterada" y con "ansiedad" y fue el personal de seguridad del puerto quien avisó a los Mossos d'Esquadra. Aún así, en un primer lugar dudó en denunciar por miedo al rechazo de su familia, de religión musulmana.

EL ACUSADO NIEGA LOS HECHOS

Por su parte, el acusado ha negado que conociera a la víctima de otros días y ha aseverado que jamás ha mantenido relaciones sexuales con ella. De acuerdo con su versión, no fue hasta pasado un tiempo cuando la encontró en el exterior de la discoteca, sentada en una escaleras y asegurando que la habían violado.

También ha insinuado que la víctima lo habría denunciado por interés económico o bien "por alguna obsesión", al aseverar que escuchó a alguna de sus amigas diciendo "sácale, que tiene pasta".