Los taxistas se plantan y amenazan con una marcha al Parlament

La tregua del sector del taxi ha durado poco. Las principales asociaciones de taxistas han convocado un paro de 12 horas para el próximo día jueves 16 de marzo para denunciar “la liberalización encubierta” del sector y el “desamparo” que sienten ante la expansión de los servicios de vehículos de alquiler con conductor (conocidos como VTC).

“Barcelona pasará un día sin taxis y esto es solo el principio”, explica a Metrópoli Abierta el portavoz de Elite Taxi Barcelona, Alberto Álvarez, cuya asociación agrupa a unos 2.000 taxistas de la ciudad. Pero esta será una huelga de todo el sector: Agrupación Taxi Companys, Paktaxi, ANGET, Taxistas Latinos Unidos y Cooperativa del Taxi también estarán. Solo falta por confirmar el Sindicat del Taxi de Catalunya (STAC), que votará esta tarde.

En total, los organizadores esperan convocar entre 6.000 y 8.000 taxistas, que saldrán a pie de Arco de Triunfo a las 10 de la mañana del jueves para ir al Parlament a entregar sus exigencias para “sobrevivir”. Según Álvarez, los sindicatos del taxi están cansados de recibir buenas palabras de las administraciones y que luego no se traduzcan en hechos concretos.

EL MOBILE COLMA EL VASO

La enorme presencia de VTC durante el Mobile World Congress (MWC), que las multinacionales contratan para desplazar a sus congresistas, ha sido la gota que ha colmado el vaso. “El conflicto viene de antes, pero ya hemos visto el impacto de los VTC en el Mobile y que solo se cuenta con los taxis cuando se nos necesita, pero no para escuchar nuestras propuestas”, lamenta Álvarez.

Los taxistas llevan años denunciando la competencia desleal de los VTC, que no están sujetos a las mismas condiciones que ellos. “A los taxis se nos exige competir contra un sector que no está intervenido ni regulado. Es como jugar un partido de tenis con las manos atadas. Cada vez trabajamos más horas y ganamos menos dinero”.

Ante la imposibilidad de entrar en el sector de forma directa, multinacionales como Uber o Cabify han aprovechado una brecha legal para pedir licencias de VTC, una vía que antes se utilizaba muy poco (chóferes con limusina, por ejemplo). Las asociaciones del taxi denuncian que las propias administraciones están violando la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres (LOTT), que establece una licencia VTC por cada 30 taxis.

En Catalunya, donde hay unos 12.000 taxis, eso implicaría la concesión de unas 400 licencias, pero actualmente hay más de 850, según los sindicatos, es decir, que ya es una proporción de 1 a 15. “Queremos crear alarma social, pero no con violencia, sino con mensaje: las grandes empresas quieren obtener más beneficios a costa del esfuerzo de los trabajadores”, sentencia Álvarez.