Taxistas a la caza de clientes durante el Mobile Congress

El Mobile World Congress (MWC) es una cita muy esperada por los taxistas de Barcelona, que durante el congreso aumentan considerablemente su facturación. El gerente de la emisora Taximés, Josep Casafont, que gestiona 350 taxis en Barcelona, estima que la semana del Mobile aumenta entre “un 30% y un 40%” la facturación respecto a cualquier otra semana del año.

Pero no todo son buenas noticias. El éxito del MWC, que ya atrae a más de 100.000 personas durante los cuatro días que dura el congreso, colapsa el recinto ferial y ha hecho proliferar los servicios de coches de alquiler con conductor (VCT) y los taxis piratas, que intentan llevarse parte del pastel. 

“Todos los eventos de esta dimensión siempre ayudan a mejorar el negocio. Desde hace cinco años hemos ganado dinero durante el Mobile, pero hemos perdido cuota de mercado”, lamenta el portavoz de Elite Taxi Barcelona, Alberto Álvarez. Los taxistas suelen quejarse de la competencia desleal durante todo el año, pero en semanas como la del Mobile las protestas son más sonoras.

ATASCOS, MULTAS Y PIRATAS

Aparcada la posibilidad de una huelga, los taxistas esperan que la Guardia Urbana sea igual de estricta con los VCT a la hora de poner multas y que intensifique los controles en los dos recintos del congreso para cazar a los taxis piratas. “Durante las ferias vienen vehículos de fuera y les dan prioridad. No es justo”, añade.

Otra de las quejas de los taxistas es la saturación del recinto ferial durante las horas punta. “La infraestructura no cumple con las expectativas. Cada vez hay más tráfico y la gran afluencia de gente supera la capacidad de las calles. A ciertas horas mucha gente no quiere coger el taxi para ir”, lamenta Álvarez.

El portavoz de Elite Taxi Barcelona asegura que habían pactado una reunión con el Ayuntamiento antes del MWC para proponer algunas medidas que podrían descongestionar los accesos a la Fira -como carriles exclusivos de entrada y salida-, pero que al final les dieron largas. “Ni nos contestaron para decir que no habría reunión, pero cuando montas una operación caracol todo el mundo quiere escucharte”.