Al menos cinco trabajadores del metro afectados por amianto / DGM

Al menos cinco trabajadores del metro afectados por amianto / DGM

Movilidad

Encuentran amianto en vagones del Metro de Barcelona

Un comunicado interno alerta a los trabajadores de la presencia de la sustancia

16 octubre, 2018 20:05

Hay amianto en el Metro de Barcelona. Los responsables pusieron en marcha hace unas semanas un proyecto para comprobar que no hubiera rastro de esta sustancia tóxica, pero este martes se han encontrado con una sorpresa. A través de un comunicado interno –al que ha tenido acceso Metrópoli Abierta– han alertado a los trabajadores de la presencia de amianto en varios vagones. Algo similar sucedió en Madrid hace unos días.

“Comunicamos la presencia de amianto no friable (crisotilo en porcentaje entre el 5 % y el 10 %) en la pintura bituminosa de un tren de la serie 4000 (únicamente coches 4053, 4055 y 4314”, han manifestado. “Se encuentra en zonas fueras del alcance del pasaje, concretamente en la zona bajo bastidor y estructura interior de caja”, dice el comunicado consultado por este medio.

EN TEORÍA, NO SUPONE UN RIESGO

En este sentido, han querido recordar que en todas la mediciones ambientales realizados no se ha detectado “presencia de amianto que suponga un riesgo para la seguridad y la salud de las personas”.

Sin embargo, tal como apunta El Periódico, han querido curarse en salud y han retirado el convoy de metro afectado que se corresponde con la línea 1. Por su parte, la CGT del Metro de Barcelona ha exigido “una reunión urgente y que se tomen las medidas necesarias ya”.

CONCENTRACIÓN CONTRA EL AMIANTO

La problemática del amianto no es nueva. El pasado 6 de octubre decenas de personas afectadas se concentraron en la plaza Sant Jaume con el objetivo de que las administraciones públicas reconozcan sus enfermedades crónicas.

La producción y el consumo de amianto se prohibió en España en 2002 pero las consecuencias de la exposición de este material despiertan ahora, puesto que los síntomas tardan entre 20 y 40 años en manifestarse. Así, se han retrasado hasta ahora las consecuencias de su exposición.

Según un estudio de la Unión Europea, de aquí a 2030 medio millón de personas morirán en Europa de cáncer por la exposición al amianto. Solo la transformación de su estructura cristalina lo hará seguro para posteriores generaciones.