Alberto Fernández, el pasado lunes, cuando anunció su adiós político al final de esta legislatura / MIKI

Alberto Fernández, el pasado lunes, cuando anunció su adiós político al final de esta legislatura / MIKI

Información municipal

“Colau ya es el problema de Barcelona”

Alberto Fernández, líder del PP, califica de “nefasta” la gestión de la alcaldesa

4 enero, 2019 12:38

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Alberto Fernández Díaz, presidente del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Barcelona, señala a Ada Colau como la gran responsable de los problemas de la ciudad y, especialmente, su deterioro en temas de seguridad.

“Colau ya es el problema de Barcelona”, ha dicho Fernández. “Su gobierno, lejos de resolver los problemas de la ciudad, los agrava”, ha dicho el líder del PP en la capital catalana. “La nefasta gestión municipal no tiene nombre y sí apellido: Colau”, añade el veterano político.

MÁXIMA RESPONSABLE

En su valoración del Barómetro que este jueves presentó el Ayuntamiento, y que identifica la inseguridad como el gran problema de Barcelona, Fernández recalca que “la delincuencia se dispara, los barrios se deterioran y la vivienda cada vez es más inaccesible”.

La inseguridad, como ya avanzó Metrópoli Abierta tras recoger los resultados del segundo Barómetro encargado a Centre d'Estudis Sociològics, es percibido como el gran problema de Barcelona por sus ciudadanos. Al respecto, Fernández ha lamentado que Colau ha bajado la guardia en seguridad, siendo ella la concejal de dicha material y la máxima responsable.

RESPUESTA A PISARELLO

Por otra parte, el presidente del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Barcelona asegura que “la acusación de Gerardo Pisarello, primer teniente de alcada, a los concejales del Partido Popular de crear alarmismo, queda desmentida por los índices de delincuencia de la ciudad”.

El incremento de la inseguridad en Barcelona y la proliferación de los narcopisos en el Raval han sido denunciados por todas las fuerzas de la oposición, no solo por el PP. Ciutadans, el PSC, ERC y PDeCAT también han criticado las respuestas tibias de Colau ante una problemática que puede pasarle factura y que tiene a la Guàrdia Urbana muy molesta con la mala gestión de su alcaldesa.