Centro de emergencias de Barcelona / @ADACOLAU

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Información municipal

Colau invierte en seguridad para el centro de emergencias y olvida los casos de cáncer

La Sala Conjunta de Mando ha registrado más de una veintena de casos de enfermedad entre los trabajadores

18 febrero, 2022 00:00

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El centro de emergencias de Barcelona continúa en una situación crítica. Situado en el número 28 de la calle de Lleida, la instalación está compartida por agentes de los Mossos d'Esquadra, Guardia Urbana, Bomberos de Barcelona y miembros del equipo del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) desde el año 2005.

La Sala Conjunta de Mando, encargada de recibir las urgencias de la ciudad, es desde sus inicios un peligro para los propios trabajadores. Las malas condiciones en las que se encuentra la instalación, que facilita una presencia de ozono que se suma a la de gas radón, ha provocado más de una veintena de casos de cáncer entre los empleados, como ha denunciado este medio en diversas ocasiones.

Pese a que la situación es conocida por el Ayuntamiento de Barcelona, fuentes municipales confirmaron recientemente a este medio que no hay novedades respecto a un posible traslado de este centro. Por contra, el consistorio barcelonés ha optado por dedicar una partida al servicio de seguridad de accesos de la instalación.

400.000 EUROS

El Ayuntamiento ha dado luz verde a una prórroga de este servicio para el centro de emergencias, aprobación que conlleva una partida presupuestaria de 400.195,40 euros en un plazo de dos años.

Sobre la cuantía total, se destinarán 121.155,04 euros en 2022, otros 200.097,70 euros para 2023 y 78.942,66 euros adicionales en 2024. Esta prórroga se iniciará el 25 de mayo de este año y finalizará el 24 de mayo de 2024.

La compañía que continuará garantizando los trabajos de seguridad de accesos en la Sala Conjunta de Mando será Grupo Control Empresa de Seguridad, SA.

Un agente de la Guardia Urbana en el centro de emergencias de Barcelona

Un agente de la Guardia Urbana en el centro de emergencias de Barcelona

SIN VOLUNTAD DE LAS INSTITUCIONES

El portavoz del sindicato de la Guardia Urbana SIP-Fepol, antiguo SAPOL, Jordi Rodríguez Lima, explicó en declaraciones a este medio que se realizaron algunas modificaciones en el equipamiento de la sala para tratar de solventar el problema sin éxito, y recordó que cuanto más tiempo estén los trabajadores allí, "más riesgo de que haya compañeros con enfermedades graves".

Meses después, Rodríguez Lima asegura que la situación "sigue igual", y lamenta la "falta de compromiso" del Ayuntamiento respecto al traslado de la sede a otro emplazamiento.

Por contra, el portavoz sindical explica que en una reunión celebrada hace tres meses, lograron el "compromiso del consejero de Interior" para llevar a cabo el traslado. El miembro de SIP-Fepol pide al Ayuntamiento que se "ponga las pilas" y hable con la Generalitat para encontrar una solución lo antes posible, y recuerda que el nuevo centro puede ubicarse "en cualquier lugar de Barcelona".