Ciudadanos apoyará cambios en la seguridad de Barcelona

El nuevo equipo de gobierno municipal podrá contar, en determinadas áreas, con el apoyo de Ciudadanos si se corrigen las políticas de gestión aplicadas en algunos de los sectores durante la pasada legislatura. Uno de los sectores más calientes es el de la seguridad, donde PSC y Ciudadanos coincidirán en las políticas a aplicar, según ha podido conocer Metrópoli de fuentes municipales.

De hecho, el próximo responsable de Seguridad del consistorio, Albert Batlle (con larga trayectoria en la materia, ya que fue secretario de Prisiones en el tripartito y más tarde director general de los Mossos d’Esquadra, hasta verano del 2017), ya se ha reunido con Ciudadanos para hablar del tema. Se da la circunstancia de que esta área fue una de las más castigadas durante el último mandato de Colau, debido a las políticas impulsadas por el equipo de gobierno.

ARREGLOS URGENTES

Las fuentes explican que “en los próximos meses habrá que arreglar el desastre en Seguridad dejado por el anterior gobierno municipal”, reordenando la Guardia Urbana, potenciando el cuerpo y volviendo a aplicar medidas de prevención fortaleciendo la figura del agente de policía local.

Fuentes de Ciudadanos, por su parte, no han negado que existen coincidencias en esta materia con los socialistas y subrayaron que la labor del partido en esta legislatura será “muy continuista con respecto a la anterior. Eso sí, estamos dispuestos a ser la barrera para los populismos y el nacionalismo tratando de aplicar una mejor gestión en los temas de ciudad”.

En este sentido, no rechazan de plano apoyar determinadas medidas. “No hay que olvidar que en materia de seguridad, por ejemplo, la propia Colau reconoció, aunque fuese a finales de la legislatura, que se habían hecho cosas mal y que habría que mejorar”, señalan. Con Batlle en el cargo, vaticinan, las cosas cambiarán y podrá haber amplias coincidencias en el modelo de seguridad que se ha de aplicar en la ciudad.

Ciudadanos apoyará que la seguridad de Barcelona recaiga en Albert Batlle

CORRELACIÓN DE FUERZAS MÁS PARITARIA

En el futuro, esta área se verá reforzada precisamente porque será competencia del PSC. Al parecer, comercio, turismo y empresa serán también áreas que dependerán de los socialistas y en las cuales intentaron aplicar distintos criterios de gestión durante el tiempo en que fueron socios de gobierno en la anterior legislatura, aunque sin éxito por el impedimento de los grandes clanes de poder de BeC en el gobierno.

La nueva correlación de fuerzas en el Ayuntamiento, con 10 concejales de Barcelona en Comú (BeC) y 8 de los socialistas, permitirán, según las fuentes consultadas, poder aplicar las políticas pactadas con mucha mayor contundencia. En la anterior legislatura, Colau tenía 11 concejales, y los socialistas sólo 4.

CAMBIOS EN EMPRESA Y TURISMO

En el área de comercio ocurre algo parecido que en el de la seguridad. “Ha habido una desbandada de empresas que no ha sido sólo culpa del procés, sino de la gestión municipal. Y eso habrá que corregirlo. Si algo coincide con nuestros posicionamientos, no nos opondremos. Siempre hemos dicho que es preciso cambiar el enfoque en algunos de temas y dejar de ver a la empresa y al autónomo o al comercio como un enemigo y no como una oportunidad”, explican las fuentes.

En materia de turismo, habrá también un giro importante en la gestión. La turismofobia alimentada desde la Administración local permitió degradar la imagen de la ciudad sin contentar a nadie. Se enfocó el tema desde la perspectiva de que el turismo es un problema y no una oportunidad, por lo que se resintió no sólo la imagen, sino la economía local.

COLABORAR CON MANUEL VALLS

El otro gran fracaso de Colau, el de la vivienda, será otra de las patatas calientes de la legislatura. En este tema, no hay que olvidar que Ciudadanos apoyó, finalmente, el plan de Vivienda de Colau. “Casi al final de la legislatura, se pusieron las pilas y comenzaron a realizar algunas de las recalificaciones de terrenos para construir vivienda pública. Ése es el camino a seguir, aunque hay que explorar todas las vías que tenemos, desde la colaboración con terceros hasta las de derecho de retracto”, afirman desde la oposición.

En algunos de estos temas, los socialistas podrán coincidir con los posicionamientos de Manuel Valls (por algo éste proviene del PSF), pero también de Ciudadanos. Y éstos no tendrán inconveniente en pactar temas con Valls siempre y cuando coincidan en sus propuestas. “Nuestra intención no es cerrarnos a colaborar con Valls, porque con él hemos coincidido en proponer un programa conjunto, con el que nos presentamos a estas elecciones. Por tanto, no hay duda de que coincidiremos en muchos aspectos y podremos otra juntos sin problemas”, subrayan las fuentes.

Si esos posicionamientos están despojados de nacionalismo (y el PSC es pragmático en sus recetas de gobierno), las coincidencias se multiplican, por lo que el nuevo equipo de gobierno puede tener una legislatura fácil a poco que se aplique en solucionar los temas de ciudad y dejando de lado las veleidades de la alta política o los posicionamientos maximalistas.