Una imagen de archivo de agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra (BRIMO) en Barcelona

Una imagen de archivo de agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra (BRIMO) en Barcelona

El pulso de la ciudad

Los 15 homicidios de Barcelona: drogas, robos, peleas y... sin resolver

Los Mossos d'Esquadra todavía investigan 10 de los 15 casos relacionados con muertes violentas

5 septiembre, 2019 13:50

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Ni tráfico de drogas ni ajuste de cuentas entre bandas. El robo de un teléfono móvil ha sido la causa de la 15ª muerte violenta en Barcelona. Una joven fue apuñalada el miércoles de madrugada en el bar-discoteca Smar, en el Port Olímpic. La chica, de 26 años y nacionalidad española, se encontraba dentro del club nocturno cuando un hombre trató de arrebatarle el móvil. La mujer pidió ayuda a un vigilante de seguridad, que al intervenir fue apuñalado, igual que la joven, que murió más tarde en el Hospital del Mar. El móvil del crimen fue, pues, un robo con violencia, un tipo de delito que ha aumentado un 30,5% durante el primer semestre de 2019 en Barcelona.

El autor del homicidio consiguió escapar del lugar de los hechos. Los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación para tratar de identificar, localizar y detener al autor o autores de la agresión mortal. Según las últimas informaciones, dos personas participaron en el robo, pero fue una de ellas quien asestó la puñalada mortal a la joven e hirió al vigilante de seguridad en el abdomen con el arma blanca. De momento, los dos atracadores se encuentran en paradero desconocido.

EL PORT OLÍMPIC DESESPERA A LA POLICÍA

La 15ª muerte se ha producido en una zona, el Port Olímpic, que se ha convertido en una auténtico quebradero de cabeza para los cuerpos policiales. Hace poco más de un mes, el 28 de julio, un joven de nacionalidad china murió tras recibir una brutal paliza a las puertas de un bar de copas. Lee Cheng, de 25 años, fue apaleado mortalmente por un grupo de hombres procedentes de Europa del Este. Aunque la paliza fue grabada por un testigo y por una cámara de seguridad, la investigación sigue abierta sin que se hayan producido detenciones relacionadas con el caso.

A raíz de la muerte de Cheng, la Junta de Seguridad Local acordó el despligue de agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra (BRIMO) en la zona del Port Olímpic, así como reforzar la presencia de efectivos de la Guardia Urbana. La medida no ha evitado la muerte de una joven un mes más tarde; tampoco la detención de los autores del homicidio. En ambos casos, los dos crímenes se han producido en una misma zona, relacionada con el ocio nocturno, aunque por causas diferentes. 

UNA MUERTE MISTERIOSA Y UN APUÑALAMIENTO

En la lista negra de este verano también figura la misteriosa muerte de una pareja de ancianos en su piso, en el barrio de La Bordeta (Sants-Montjuïc). El 25 de agosto fueron hallados sin vida en su domicilio con signos de violencia, aunque los Mossos d'Esquadra todavía no han determinado la causa de la muerte. Podría tratarse de un suicidio pactado --por lo que no entrarían en el cómputo de homicidios--, un doble asesinato o un caso de violencia de género. De nuevo, el caso sigue sin resolverse. 

Una semana antes, el 16 de agosto, un hombre de origen dominicano murió como consecuencia de un apuñalamiento en el barrio de Vilapicina (Nou Barris). El hombre, de 47 años, recibió varias cuchilladas durante una reyerta en la calle. Pese a que los Mossos aseguraron tener identificado al agresor, no se produjo ninguna detención relacionada con el caso. Asimismo, tampoco trascendió la causa de la pelea, que derivó en una muerte más en la ciudad de Barcelona. 

SEIS HOMICIDIOS EN AGOSTO

Cuatro días antes, el 12 de agosto, la policía catalana se encontró el cadáver de una mujer de nacionalidad sueca en el paseo de Can Tunis (Sants-Montjuïc). Los agentes se la encontraron semidesnuda, con claros signos de violencia. Tampoco trascendió la causa de su muerte ni se consiguió localizar al autor o autores del crimen. 

El 8 de agosto, un hombre murió durante una pelea en la plazoleta del Comerç, cerca de Arc de Triomf (Ciutat Vella). El individuo recibió un botellazo durante la reyerta, que se produjo en las inmediaciones de un centro de drogodependencia. Los implicados, tres hombres que conocían a la víctima al ser todos ellos usuarios del centro, fueron detenidos por los Mossos d'Esquadra.

Así, agosto se cerró con seis presuntos homicidios si se contabiliza la pareja de ancianos hallados sin vida en su piso de La Bordeta. Además, durante el mismo mes mataron a un hombre en el barrio de la Mina en el transcurso de una pelea, que queda exluido del cómputo global de Barcelona por haber ocurrido en Sant Adrià del Besòs, municipio colindante con la capital catalana.

JULIO, UN MES SANGRIENTO

Julio también fue un mes fatíditico para Barcelona en lo que se refiere a las estadísticas criminales. El mes se cerró con la muerte del ciudadano chino en el Port Olímpic ya mencionada, pero antes diferentes barrios de la ciudad fueron escenario de muertes violentas por causas de distinta índole. 

El Raval fue uno de ellos. El 25 de julio, un hombre de nacionalidad marroquí murió acuchillado en la plaza de Folch i Torres. El autor del homicidio consiguió darse a la fuga con la plaza llena de gente, sin que la policía lo localizara en los días posteriores. Finalmente, el autor confeso del crimen se entregó voluntariamente a la policía 11 días más tarde, sin que trascendiera el motivo que le llevó a apuñalar a su víctima. 

Se entrega el autor del último apuñalamiento mortal en el Raval / Policía Nacional

Se entrega el autor del último apuñalamiento mortal en el Raval / Policía Nacional

Se entrega el autor del apuñalamiento mortal en el Raval / Policía Nacional

TIROTEO EN POBLENOU; NAVAJAZO EN EL EIXAMPLE

El 12 de julio se produjo otro homicidio en Barcelona, esta vez en el barrio de Poblenou (Sant Martí). El hombre, de 36 años, fue acribillado a balazos en plena calle y falleció días después en el Hospital del Mar. El autor del tiroteo huyó del lugar de los hechos en patinete eléctrico, sin que la policía haya dado con él hasta la fecha. Los Mossos, que mantienen la investigación abierta, barajan la posibilidad de que se trate de un ajuste de cuentas por tráfico de drogas. El mismo día se produjo un tiroteo en el interior de la discoteca Shoko, aunque en esa ocasión no hubo que lamentar víctimas mortales ni heridos.

Dos días antes, el 10 de julio, una pelea en el interior de un locutorio del Eixample finalizó con un trágico final. Uno de los implicados murió apuñalado por otro de los participantes en la pelea. En esta ocasión, la policía catalana detuvo a las personas implicadas, un hombre y una mujer, y atribuyen como móvil del crimen a una disputa sentimental.

ASESINATO DE SARRIÀ

Pero el asesinato del mes tuvo lugar una semana antes, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi. Barcelona estremeció ante el crimen de la peluquería Spejos, todavía hoy sin resolver. El 6 de julio, un encapuchado irrumpió en una peluquería del paseo Manuel Girona, justo cuando el local se disponía a cerrar. La dueña del comercio vio al hombre, armado con una pistola, y se escondió en en el interior del establecimiento. Sin embargo, en ese momento también se encontraba en el lugar el marido de la peluquera, que recibió varios disparos por parte del asaltante. Murió en el acto. 

En un inicio se barajó la posibilidad de que se tratara de un intento de robo, pero la policía comprobó que el asaltante no se llevó el dinero de la caja. A día de hoy, el crimen sigue sin resolverse, y el autor material del asesinato nunca fue detenido.

MUERTE DE UNA DIPLOMÁTICA

Otro caso que también causó una gran conmoción en la ciudad --y que tuvo una repercusión internacional-- fue la muerte de una alto cargo del Gobierno de Corea del Sur como consecuencia de un intento de robo. La mujer sufrió un tirón desde una moto, y al resistirse, cayó y se golpeó con la cabeza contra el suelo, con unas consecuencias fatídicas. Tres días más tarde, falleció en el Hospital del Mar, debido a las heridas causadas por la caída. Los Mossos, de nuevo, siguen buscando al autor del intento de robo y homicidio.

OTROS HOMICIDIOS

Más allá del verano, otros tres homicidios han tenido lugar en Barcelona en lo que llevamos de 2019. El 21 de mayo, una joven de 17 años fue asesinada por un hombre en la avenida Mistral (Eixample). Supuestamente, la chica no tenía ninguna relación con su verdugo, que fue detenido el mismo día de los hechos y puesto en prisión preventiva tres días más tarde. 

En mayo también tuvo lugar otro tiroteo sangriento en Barcelona. El día 17 de ese mes, un hombre fue tiroteado en el interior de un piso del Eixample, en la calle Urgell. El autor del asesinato consiguió huir del lugar de los hechos, sin que la policía haya dado con él hasta el momento. Los Mosos sospechan que el caso podría estar vinculado al tráfico de drogas.

Por último, el 9 de febrero una pelea mortal a las puertas de la discoteca Razmatazz acabó con la vida de un joven de 23 años originario de Mali. El chico se enfrentó a un grupo de paquistaníes, que lo apalearon a las puertas de la discoteca hasta matarlo. La policía catalana también relaciona el caso con una posible disputa por drogas, aunque no han realizado ninguna detención hasta el momento. 

10 CASOS SIN RESOLVERSE

De las 15 muertes violentas que han tenido lugar en Barcelona durante este 2019, 10 de ellas siguen aún sin resolverse (el 66,6%) y sin que se hayan producido detenciones relacionadas con todos estos casos.

¿Cuáles son las causas de estos homicidios y asesinatos? Según explicaron los Mossos d'Esquadra a finales de agosto, dos de cada tres homicidios estaban vinculados con el tráfico de drogas, se trataba de crímenes sin conexión entre ellos y, teniendo en cuenta la serie histórica, las cifras, pese a ser preocupantes, no eran excepcionales, al menos para el cuerpo policial. No obstante, los últimos datos apuntan a un incremento de muertes violentas relacionadas con peleas y robos.