El Barça pone la directa en la Liga

El Barça prioriza la Liga. La quiere sí o sí y ha puesto la directa. Después de encadenar dos empates, el equipo de Ernesto Valverde rescató su perfil más pragmático y ganó en Villarreal (0-2), con goles de Luis Suárez y Leo Messi, suficientes para encarar la cita del Bernabéu (23 de diciembre) como líder. Marcaron las estrellas, pero el gran revulsivo fue Paco Alcácer, un actor secundario que aprovecha perfectamente todos los papeles que interpreta.

No podía fallar el Barça tras las victorias del Valencia, del Real Madrid y del Atlético. Y no falló. Optó Valverde por un equipo muy equilibrado, con menos desborde pero muy compacto para rebajar la productividad del Villarreal, que resistió hasta la expulsión de Raba. Con superioridad numérica, el cuadro azulgrana tocó y tocó a la espera de una jugada de tiralíneas que acabara con la resistencia castellonense. Alba, muy activo, se prodigó por la banda izquierda, pero la solución a todos los problemas llegó de la manera más inesperada. Por el centro y en el minuto 71.

Tocó Sergio Busquets, aceleró Messi, Luis Súarez combinó con Alcácer y el valenciano se la devolvió al uruguayo, que marcó tras regatear a Asenjo. En apenas tres segundos, el Barça resolvió un partido que controló de principio a fin.

LOS CAMBIOS DE VALVERDE

Tocado, el Villarreal arriesgó y Messi sentenció tras recoger otro regalo de Sergio Busquets. El astro argentino, una vez más, destapó su mejor repertorio y fue el epicentro sobre el que gravitó todo el juego barcelonista.

Messi lideró al Barça, revitalizado en el segundo tiempo con las incorporaciones de Alcácer y Aleix Vidal. Una vez más, Valverde movió pieza con criterio y su equipo se reencontró con la victoria cuando algunos malos presagios parecían instalarse en el Camp Nou. Ni los deseos de irse de Mascherano ni la lesión de Umtiti parecen inquietar al técnico azulgrana. Con él, hasta Vermaelen es un futbolista fiable y el Barça suma y sigue.