Rambla central de la avenida Icaria en la que se aprecian los adoquines que serán sustituidos

Rambla central de la avenida Icaria en la que se aprecian los adoquines que serán sustituidos

Sant Martí

La avenida de Icària renovará su rambla central

Se han empezado a sustituir los adoquines originales por un pavimento más resistente de hormigón prefabricado

25 noviembre, 2017 10:48

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La rambla central de la avenida de Icària, la arteria principal y auténtico corazón de la Vila Olímpica, lucirá un aspecto renovado en todo su trazado. El Ayuntamiento de Barcelona acaba de iniciar las obras de sustitución del pavimento de los seis tramos vial -que todavía es el original colocado para los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992- y que al estar formado por adoquines se encuentra muy deteriorado y con la práctica totalidad de las piezas rotas o desgastadas.

Las obras, que tienen un presupuesto de 2,2 millones de euros, consistirán en la colocación de unas piezas más resistentes de hormigón prefabricado y se ejecución se prevé que finalice dentro de siete meses Los trabajados se han iniciado en los tres tramos comprendidos entre las calles de Badajoz y Arquitecte Sert, un sector que debería estar listo el próximo mes de febrero. Durante todo este periodo estará cortada la confluencia de las calles de Joan Oliver y de Àvila. En una segunda fase se actuará en los otros tres sectores de la rambla central hasta la calle de Marina, una intervención que obligará  a cerrar al tráfico el cruce con la calle de Rosa Sensat .

El proyecto de reforma de la avenida Icària, que tiene unos 800 metros de longitud, es una vieja reivindicación vecinal y el proyecto -previsto desde hace casi una década- se ha ido postergando. Los retrasos en el inicio del proyecto han ocasionado que los vecinos transiten cada vez menos la rambla central, que se ha ido deshumanizando y quedando sin uso con el paso de los años. El uso de la avenida como zona de patinadores también ha acelerado la degradación del pavimento.Para solventar el problema se pidió la colaboración del barrio, mediante un proceso participativo, y han sido los propios vecinos los que se han decantado por este tipo de intervención frente a otras que suponían una actuación urbanística mucho más profunda.

MEJORAS EN EL MOBILIARIO Y LA ILUMINACIÓN

El concejal del distrito de Sant Martí, Josep Maria Montaner (BeC), ha reconocido que las obras supondrán "un cambio muy importante" para la Vila Olímpica porque "la rambla central se había deteriorado y cada vez se utilizaba menos". Además de la sustitución de los adoquines las obras incorporarán mejoras en el mobiliario urbano y en el alumbrado público, que sustituirá sus fuentes de iluminación por bombillas de leds que tienen un menor consumo.

Montaner ha explicado que, cuando finalicen las obras, la avenida de Icària se convertirá en "un eje urbano con más personalidad y mucho más utilizado". “Es la avenida con más comercios del barrio y queremos que tenga más vida urbana como el resto de barrios de la ciudad”, ha agregado Montaner, algo de lo que adolece la Vila Olímpica". Se trata de conseguir que los peatones la “llenen” lo que daría un mayor dinamismo a la zona comercial.

La remodelación comporta la anulación del carril rápido de cada lado de la calzada y durante la ejecución de los trabajos solo estará operativo el carril bus, aunque podrá ser utilizado por todos los vehículos sin ningún tipo de restricciones. Los pasos para peatones que atraviesan longitudinalmente las seis manzanas quedarán anulados y solo se mantendrán abiertos los transversales. El carril bici de la calle de Àlaba no estará operativo cuando se sustituya el pavimento de ese sector, por lo que se recomienda que se use como ruta alternativa el carril bici de la avenida del Litoral.

La operación que acaba de comenzar es la primera de gran envergadura en la avenida desde los Juegos Olímpicos, aunque las polémicas marquesinas de madera diseñadas que dan tanta personalidad al paseo ya han sido objeto de trabajos de mantenimiento recientemente. El concejal de Sant Martí ha reconocido que las obras olímpicas se ejecutaron a contrareloj “pero se hicieron bien”. No obstante, el material escogido para el pavimento, aunque muy vistoso en sus orígenes, no fue el adecuado porque "se ha demostrado que se deteriora mucho tanto por el uso como por las condiciones meteorológicas", ha subrayado Montaner.