Los robos con violencia han aumentado de forma considerable en la calle Hospital / CR

Los robos con violencia han aumentado de forma considerable en la calle Hospital / CR

Ciutat vella

La calle Hospital, “el nuevo Bronx” de Barcelona

Vecinos y comerciantes se quejan del aumento de los robos y de la violencia de los ladrones

17 abril, 2019 00:00

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La calle Hospital, en pleno corazón del Raval, parece un mar de tranquilidad. Es mediodía y el tráfico de personas, coches y vehículos de reparto de mercancías es incesante. El visitante pasea por la zona sin percibir la fragilidad de una situación que cada día se revierte para transformar la calle en una zona menos sosegada conforme la tarde-noche va ganando terreno.

Lo saben bien los comerciantes y vecinos de la zona. Llevan tiempo peleando para lograr que el Ayuntamiento y el distrito se pongan a la tarea de acabar con una situación que corre el riesgo de enquistarse. Del menudeo de la droga y los hurtos al descuido, sobre todo a los turistas, se ha pasado a las peleas entre bandas de jóvenes para hacerse con el control de la zona hasta el uso de un alto grado de violencia para robar, sobre todo, a los turistas extranjeros.

“Eso es ahora”, dice Eduard, comerciante de la zona. “Pero a partir del mediodía, el panorama cambia”, añade.

LOS PRIMEROS VAN LLEGANDO

No hay que esperar mucho. Pequeños grupos de jóvenes hacen acto de presencia y van arriba y abajo por la calle como si tal cosa. “Ahora empiezan a venir”, dice Eduard, que los identifica de inmediato. “Y se quedarán hasta la madrugada”, afirma observando la calle. Y añade : “Muchos de ellos acaban drogados” y eso provoca que algunas veces “se peleen entre ellos por tonterías, aunque algunas veces incluso sacando navajas”. Aunque también se pelean cuando “otro grupo de jóvenes llega e intenta meterse en la calle. Entonces pelean para defender lo que consideran su territorio”, sentencia.

Los vecinos y comerciantes exigen más presencia de la Urbana / CR

Los vecinos y comerciantes exigen más presencia de la Urbana / CR


Un coche de la Guardia Urbana permanece estacionado por la zona y eso impide que los jóvenes se detengan. Siguen su camino como si tal cosa, “pero en cuanto la patrulla desaparezca, se planta en la esquina para el resto del día”, asegura.

SITUACIÓN DESCONTROLADA

No es el único comerciante de la zona que se queja del comportamiento de estos jóvenes, aunque lleva tantos años en el barrio que tiene la autoridad necesaria para describir la situación actual respecto a anteriores etapas. “No es que antes no pasara nada, pero ahora la situación se ha descontrolado y esto se ha convertido en el Bronx”, recalca.

Y no tiene reparo en acusar al actual equipo de gobierno municipal que preside Ada Colau de lo que pasa en el barrio. Eduard expone sus razones: “No se ha actuado conforme a la ley y ha habido mucha permisividad, sobre todo con los menores inmigrantes que ante la falta de salidas se meten en estos grupos que se dedican a delinquir”.

Cerca mantiene el negocio abierto Natalia. Apenas lleva unos meses en la zona, pero no tardó en darse cuenta de que la situación no era normal. “Cada día veo trapicheo de droga y algún robo, es casi normal”. Para ella, lo peor es que siente que nadie hace nada para “acabar con esta situación que se va complicando”.

Algunos vecinos reconocen tener miedo al salir a la calle / CR

Algunos vecinos reconocen tener miedo al salir a la calle / CR


Lleva apenas unos meses trabajando en la calle Hospital, “pero he visto cosas que creía que aquí no ocurrían” explica antes de reconocer que estaba acostumbrada a convivir con un cierto grado de delincuencia en su Buenos Aires natal.

MÁS VIOLENTOS

Eduard afirma que la situación ha ido empeorando, “sobre todo cuando se hace de noche”, por los métodos que emplean los delincuentes. “Antes iban al descuido, ahora rodean a una persona entre diez, la tiran al suelo y le roban todo lo que lleva”, dice. Muchas veces “solo nos enteramos cuando alguien grita pidiendo auxilio, pero entonces los ladrones ya se han perdido por las callejuelas”.

Un relato similar cuenta Rafael, un vecino de la zona. “A veces da miedo pasar por donde están, por sus miradas”. Pero quién lo pasa peor son las mujeres, sobre todo las chicas jóvenes, “que se tienen que escuchar de todo cuando pasan cerca de ellos”. Y, claro, el miedo se acaba imponiendo y ya no vuelven por la zona.

Un detalle refleja el miedo que se ha instalado en la zona. Muchas mujeres que viven por allí salen a la calle sin bolso, ya que prefieren llevar sus pertenencias en los bolsillos para no llamar la atención de los delincuentes. Es la forma que han encontrado para intentar protegerse.

“A VER CUÁNDO ABREN EL HOTEL”

Algunos comerciantes y vecinos ven una posible solución en la apertura de un hotel de lujo en la zona. “Por lo menos tendrá vigilancia las 24 horas del día, la calle estará iluminada y seguro que hay más presencia policial”, dice Rafael. “A ver cuándo lo abren y se empieza a solucionar este asunto”, dice esperanzado. Aunque también es consciente de que la situación del barrio no se va a solucionar de un día para otro, “pero si todos ponen un poco de su parte, algún día ya no dará miedo salir a la calle”.