Subestación eléctrica del Poblenou / PABLO ALEGRE

Subestación eléctrica del Poblenou / PABLO ALEGRE

Sant Martí

Endesa empieza a tirar la subestación eléctrica del Poblenou

El terreno se destinará a la ampliación en 2019 del contiguo parque del Patufet

25 julio, 2017 13:05

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Los vecinos del Poblenou están de enhorabuena. Endesa ha iniciado las obras para limpiar y derribar la subestación eléctrica de la calle Castella, ubicada entre el Parque de Bomberos y la escuela Sant Martí. Unas instalaciones casi centenarias (se construyeron en 1920) que han dado luz durante décadas al 'Manchester barcelonés'.

La subestación eléctrica dejó de estar operativa el lunes de la semana pasada. Ya sólo quedan los restos y alguna máquina que se está retirando de la actividad que se realizaba allí. El Ayuntamiento ha llegado a un acuerdo con Endesa para la expropiación del terreno y la limpieza del mismo, donde está prevista una zona verde.

El Ayuntamiento destinará 4,4 millones de euros. 1,6 millones costará la adquisición del terreno, mientras que los 2,8 millones restantes se destinarán al desmantelamiento de las instalaciones. La finca donde se ubica la subestación alcanza 1.317 metros cuadrados y suministraba energía a 10.900 clientes de Endesa, que ya se alimentan de otras terminales, concretamente de las del Clot y Badalona.

La demolición de la subestación es una larga reivindicación de los vecinos del Poblenou, especialmente desde que se construyó al lado la escuela Sant Martí. Ahora se ha abierto un proceso participativo en el que los vecinos, juntamente con el colegio, podrán aportar ideas sobre el uso que se le dará a este espacio, que será ajardinado.

El origen del desmantelamiento de la subestación se fija en 2002, cuando Endesa y el Ayuntamiento firmaron el primer acuerdo para colaborar en la mejora del medio urbano. Posteriormente, en 2015, el consistorio llegó a un acuerdo con la eléctrica el derribo de las instalaciones y la expropiación del terreno.

El proceso de apagado de la subestación también ha sido largo. Los trabajos se iniciaron en 2016, con la reconfiguración de la red del distrito para que los vecinos del barrio no quedarán desatendidos con el apagado de las instalaciones ni tuviera afectación en otros lugares, pues ejercía de conector entre las redes de otros puntos de la ciudad como las subestaciones de Badalona, Maragall, Mata, Tanger y Sants.