Uno de los accesos a la escual Ausiàs March de Les Corts / M.S.

Uno de los accesos a la escual Ausiàs March de Les Corts / M.S.

Les Corts

La escuela más antigua de Les Corts denuncia su futuro cierre

Padres y madres de alumnos exigen explicaciones por el plan del Consorci d’Educació de convertir el centro en un instituto

20 febrero, 2017 20:46

La ampliación de la oferta de educación pública de Barcelona se ha convertido en un juego de ajedrez que ha desconcertado a algunos padres. Especialmente, a la asociación de padres y madres de alumnos (Ampa) del Ausiàs March, la escuela más antigua del distrito de Les Corts.

El pasado jueves, la presidenta del Consorci d'Educació de Barcelona, María Jesús Mier, exponía el plan para el próximo curso: 5 escuelas y un nuevo instituto. Centros que se repartirán entre los distritos de Gràcia, Eixample, Sant Martí y Les Corts. Y en este último, precisamente, es donde se ha desatado una tormenta que ha llevado al Ampa del Ausiàs March ante la Síndica de Greuges de Barcelona, María Asunció Vilà.

En la denuncia, que ha sido aceptada, la junta del Ampa sostiene que el Consorci d'Educació de Barcelona quiere cerrar el centro escolar, abierto desde 1892, y critica que la decisión se conociera por casualidad durante una Audiencia Pública celebrada en el distrito. El escrito, presentado el 13 de febrero ante la Síndica, aclara que uno de los padres se enteró el miércoles 1 de febrero de 2017 de la decisión del cierre tras la intervención de una madre de alumnos del CEIP Ítaca.

 

 


“El hecho de que el conocimiento del cierre de la escuela fuera casual y que los responsables públicos informarán en la Audiencia Pública antes que comunicárselo a los miembros de la comunidad escolar, en especial al Consell Escolar y al Ampa, supone un agravio”, reza el documento entregado a la Síndica.

El Ayuntamiento de Barcelona, por su parte, niega que el futuro de la escuela más antigua de Les Corts sea el cierre. La concejala portavoz en el distrito, Laura Cañadas, sostiene que se transformará en un instituto dentro de 3 ó 4 años.

Para ello, y de forma paulatina, las plazas de educación primaria se irán reduciendo. El próximo curso dejará de ofrecerse plazas de P3; el curso 2018-2019, tampoco se ofrecerán plazas de P4 y así, sucesivamente, hasta eliminar la oferta pública. A cambio, se creará una segunda línea (segundo grupo) para cada curso en un nuevo emplazamiento: una escuela aún por construir junto a la Illa Diagonal. Hasta entonces, se habilitará la ahora biblioteca Can Rosés como escuela provisional.

El motivo por el que se ha decidido transferir los alumnos a una nueva escuela es que en el Ausiàs March no hay suficiente espacio para crear nuevos grupos de cada curso. Y sin espacio, no se puede incrementar la oferta pública de educación. 

A la pregunta de por qué los padres desconocían los planes del Consorci d’Educació, Cañadas sostiene que estaba programado explicarlo una semana después de que se conociera por casualidad. “Al filtrarse en el Ítaca, se aceleraron las cosas a nivel informativo”, puntualiza.

Cañadas también sostiene que la biblioteca estará adecuada a las necesidades de los más pequeños el próximo curso, aunque no contará con un patio para los alumnos. Por ello, deberán ir a las instalaciones del CEIP Ítaca para disfrutar del tiempo libre. A su vez, Cañadas explica que todo el material bibliotecario será trasladado a la biblioteca Can Bell-Lloc.

La dirección de la escuela ha convocado a los padres y madres este martes para aclarar el futuro de la escuela.